domingo, diciembre 24, 2006

Envejecer

Ese nadie,
o cuervo,
petulante sombra,
vida, que empuja a estas piernas,
que se pierden,
que se agotan,
dolor de amigo,
de amor,

los recuerdos pensando en mí,
trozo apartado de mi vida,
heridas,
una lágrima siempre asomando entre mis pestañas,
amenazando,
paraíso finito,

esperanza interminable,
porque al ver esas caritas
nace la sonrisa,
abre mi para-caídas,
vida de éstas llenas,

sin gloria,
la condena de la pena,
del olvido,
tornado de emociones,
que arrasan estos ojos,

Perro atropellado,
dos canas entre las cejas,
corazón dislocado,
convencido de su fracaso,
lágrimas siempre aguantadas,
y un suspiro que nace
siempre a la vuelta del pasillo,
hombre que recuerda días menos grises,
convéncete,


los músculos me duelen porque los he utilizado,
ahora me cuesta trabajo subir esas escaleras,
porque he subido todas la noches
para tenderme en la cama
junto al hombre que me amaba
porque viví demasiado
unas cuantas arrugas, si
pero he visto miles de cielos y días soleados
soy y me siento así,
porque he vivido y fumado
vivido y cantado,
sudado y amado
bailado y he hecho el amor tanto
que he tenido una vida estupenda
envejecer no es malo,
envejecer es un premio
intentando demostrar que aún tiene veinte años,

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1 comentarios:

Blogger Gsús Bonilla ha dicho...

hola poeta,

como va a ser malo envejecer
leyendo
estos pedazos de poemas
que nos regalas.

espero que todo te vaya bien.

sé que eres intensa en tus sentimientos, y así ha de ser,
porque para escribir como lo haces,
si, así ha de ser.

a mí y nosotros nos gustas,
y sigue escribiendo.

bersos

4:29 a. m.  

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